Además de dar charlas, trabajar en medios de comunicación y escribir libros, Gloria se hizo muy popular en Twitter, con su cuenta@crazyglorita. Esta mujer atractiva, en ideas y apariencia, se define como “libertaria y atea” y es quien habla (con conceptos propios y compartidos) sobre gobiernos populistas. Aprovechando la visita a Córdoba, por la presentación de su último libro, hablamos con ella sobre la importancia de “parecer” en un entorno donde todo se basa en el “pensar”.
Sos una persona interesada en las cuestiones más profundas de la sociedad, pero al mismo tiempo se te ve coqueta, ¿cómo llevás tu relación con la moda en el universo de los intelectuales?
Me encanta la moda y me encanta poder ser femenina, en un mundo donde para que la mujer pueda ser respetada tradicionalmente tenía que vestir el típico traje sastre. Casos testigo son los de Hillary Clinton, Ángela Merkel, Margaret Thatcher, Dilma Rousseff o Michelle Bachelet: todas se visten iguales y con el mismo corte de pelo.
Me encanta la moda y me encanta poder ser femenina, en un mundo donde para que la mujer pueda ser respetada tradicionalmente tenía que vestir el típico traje sastre. Casos testigo son los de Hillary Clinton, Ángela Merkel, Margaret Thatcher, Dilma Rousseff o Michelle Bachelet: todas se visten iguales y con el mismo corte de pelo.
¿Cómo se logra romper con estos paradigmas machistas?
Si queremos una mujer más empoderada, más chic, que se meta en el rollo intelectual, tiene que tener opciones y saber que puede combinar la moda muy bien. Vengo de un país donde el colorido está por todas partes y me gusta combinar elementos de color, darle un poco de vida a un mundo tan masculino.
Si queremos una mujer más empoderada, más chic, que se meta en el rollo intelectual, tiene que tener opciones y saber que puede combinar la moda muy bien. Vengo de un país donde el colorido está por todas partes y me gusta combinar elementos de color, darle un poco de vida a un mundo tan masculino.
¿Y cómo te recibió ese “mundo tan masculino”?
Mucha gente quería que cambiara mi estilo cuando mi discurso se hizo viral: “podrías verte más seria”, me decían. Pero realmente mi estilo siempre ha sido así, siempre me ha gustado mucho lo hippie. Si voy a ir por el mundo dando un mensaje necesito ser yo, sino va a ser algo muy artificial. Además, conectas mejor con los jóvenes siendo tú, seas quien seas.
Mucha gente quería que cambiara mi estilo cuando mi discurso se hizo viral: “podrías verte más seria”, me decían. Pero realmente mi estilo siempre ha sido así, siempre me ha gustado mucho lo hippie. Si voy a ir por el mundo dando un mensaje necesito ser yo, sino va a ser algo muy artificial. Además, conectas mejor con los jóvenes siendo tú, seas quien seas.
Todo esto indica que “la ropa habla de la gente”…
Sí, tu ropa por supuesto habla de ti. Además, uno no tiene por qué abandonar su feminidad para estar en un mundo masculino, sino todo lo contrario. Una puede ser femenina y dar la batalla desde ahí. Si hasta los cuadros de la Revolución Francesa o de Cleopatra (mujeres que han hecho impacto) no dejaban su feminidad tirada.
Sí, tu ropa por supuesto habla de ti. Además, uno no tiene por qué abandonar su feminidad para estar en un mundo masculino, sino todo lo contrario. Una puede ser femenina y dar la batalla desde ahí. Si hasta los cuadros de la Revolución Francesa o de Cleopatra (mujeres que han hecho impacto) no dejaban su feminidad tirada.
¿Cómo te llevas con el consumismo?
Trabajo desde los 17 años y siempre gasté conforme lo que tenía. Me he alejado de las tarjetas de créditos y sólo uso de débito. He sido de esas personas que ahorran para luego tener, y me gusta la idea de reciclar ropa o hacerle cosas para no caer en el consumismo.
Trabajo desde los 17 años y siempre gasté conforme lo que tenía. Me he alejado de las tarjetas de créditos y sólo uso de débito. He sido de esas personas que ahorran para luego tener, y me gusta la idea de reciclar ropa o hacerle cosas para no caer en el consumismo.
¿Le huís a los shopping entonces?
¡Me gusta el shopping, como a cualquier mujer! Sin embargo, lo más importante es la creatividad: me gusta la idea de encontrar cosas en pequeños mercados o reciclar prendas viejas.
¡Me gusta el shopping, como a cualquier mujer! Sin embargo, lo más importante es la creatividad: me gusta la idea de encontrar cosas en pequeños mercados o reciclar prendas viejas.
by Emiliana Felizzia
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